Testimonio de paciente de Terapia Visual en Asturias: Sara 11 años
Llevo un año viniendo al centro de Visualia y, después de un año he mejorado mucho gracias a unos ejercicios que me mandaban hacer en casa.
Algunos ejercicios eran más divertidos, otros eran más aburridos.
Viniendo a este centro he podido hacer cosas que nunca había logrado y han hecho que mejorase mucho y, lo más importante para mi, es que he aprendido qué sienten mis ojos.
Ahora sé cuando un ojo se me va hacia un lado y sé cuando tengo que corregirlo.
Lo que más trabajo me costó fue la convergencia, pero todo lo que trabajé durante un año me ayudó mucho.