Recomendaciones de salud visual infantil
A lo largo de las últimas semanas hemos estado compartiendo recomendaciones de salud visual infantil en nuestras redes sociales, consejos que recogemos en esta entrada dada la importancia del cuidado de la visión de nuestros/as hijos/as y su impacto en su vida cotidiana, empezando por el rendimiento académico y escolar que se puede ver mermado, muchas veces sin darnos cuenta de que no se trata de un problema escolar, sino de un problema de visión o audición.
Posturas adecuadas para leer y estudiar
- Se debe evitar siempre un acercamiento excesivo en las tareas de cerca (escribir, leer, dibujar, usar el móvil u ordenador), ya que trastorna el sistema acomodativo, oculomotor y/o binocular.
- Esté leyendo, dibujando o escribiendo, tu hijo/a no debería estar muy cerca de sus tareas. Para la salud visual infantil, más centímetros no significa más aprendizaje.
- No conviene que coja el lápiz o el bolígrafo por la punta. Debe, por contra, cogerlo por encima de ella para evitar posturas inadecuadas.
- Los niños, tanto en clase como en casa, cuando hacen sus tareas, deben sentarse con la espada recta y manteniendo la distancia correcta con la mesa o pantalla (pies apoyados en el suelo y espalda derecha).
- Si están ante un ordenador de sobremesa, es imprescindible que dicha distancia sea de 45 a 55cm (la distancia que hay del hombro a los dedos de la mano) y mantengan sus ojos ligeramente por encima de la mitad de la altura de la pantalla. La distancia de los ojos a los ordenadores portátiles debe ser algo mayor (de 40 a 45cm)
- La distancia de lectura no debe ser demasiado corta, la distancia ideal es aproximadamente del codo hasta la primera falange. La distancia de los ojos a la lectura, escritura, al móvil o a la tablet debe ser de unos 35cm (la distancia que hay del codo a la palma de la mano). Al leer, los antebrazos han de estar apoyados sobre el plano de trabajo.
- Se deben evitar posturas raras prolongadas que conlleven el tener la espalda o la cabeza girada o doblada. Por ello, no es recomendable hacer los deberes, estudiar, jugar a videojuegos o ver la televisión acostado o tumbado sobre el sofá o sobre el suelo.
Iluminación en la zona de estudio
- Mantén una buena iluminación de su zona de estudio. Esto es esencial para que no fuerce la visión. La iluminación es un factor fundamental para los trabajos en cerca. Es necesaria una iluminación general uniforme y una fuente individual, como un flexo, que aporte la luz al papel y no a los ojos para no tener deslumbramientos. Una luz insuficiente hace que aparezca antes la fatiga visual.
- Además de la luz general de la habitación, conviene usar otra de refuerzo en la mesa de estudio. Debe estar situada en la zona contraria a su lateralidad para no provocar sombras (a la izquierda si es diestro/a y a la derecha si es zurdo/a), pero evitando que deslumbre directamente en los ojos.
Espacios de ocio y trabajo
- Siempre que sea posible, se debe situar el escritorio o mesa de trabajo delante de una ventana para poder mirar a lo lejos cada cierto tiempo.
- Controla la calidad del aire en el espacio de trabajo. La calefacción y el aire acondicionado pueden crear un ambiente seco que producen irritaciones oculares.
- La televisión debe estar al menos a unos 2 a 3 metros de distancia. Si su visión es normal, no debería tener dificultades para ver la imagen de manera correcta a esa distancia. Si está en penumbra o con baja iluminación, no generará daño en los ojos, pero será una visión menos confortable que con mejor iluminación.
Revisión de la visión
- Los/as niños/as deben tener su primer examen de la visión entre los 6 y los 12 meses. Este examen es importante para detectar problemas visuales que podrían impedir la capacidad del niño/a para aprender.
- La etapa estudiantil infantil supone un importante esfuerzo visual que puede dar lugar a problemas en la interpretación y procesamiento de la información por desajustes tanto en la agudeza visual como en la motricidad ocular, en la binocularidad o en el sistema acomodativo.
- Realizar un examen visual optométrico cada año o en el momento que disminuya el rendimiento en los estudios o aparezcan otros signos o síntomas que lo recomienden es fundamental.
Hábitos saludables
- Tanto las personas adultas como los/as niños/as deben seguir la regla del 20-20-20, esto es que debemos relajar la vista 20 segundos cada 20 minutos mirando un punto a 20 pies (lo que equivale a 6 metros). ¡Descansar la vista es fundamental!
- La nutrición es un factor importante para el apoyo de la salud ocular y el desarrollo visual. Es necesaria una alimentación apropiada con fruta y verdura tanto para una buena salud ocular como para una buena salud general.
- Cuida de que tu hijo/a lleve una dieta sana y equilibrada (verduras, frutas, pescados, legumbres, frutos secos…) para favorecer el desarrollo correcto de su sistema visual.
- Comer frutas, verduras y pescado también es básico para el sistema visual. Por ejemplo, los ácidos grasos omega-3 del pescado o frutos secos reducen la inflamación de los vasos sanguíneos del ojo.
- Promueve los juegos y las actividades al aire libre. En el exterior se trabaja la visión lejana, un gesto sencillo que previene la aparición de la miopía.
- Los/as niños/as se pasan el día tocando todo, tanto en casa como fuera. Por supuesto, esto no es malo y les sirve para dar rienda suelta a sus necesidades de exploración y aprendizaje directo. Eso sí: la salud visual de tu hijo/a es importante y deben seguir siempre pautas de higiene. Por ejemplo, no tocarse nunca los ojos con las manos sucias.
- Aunque hablamos de la importancia de actividades al aire libre, es necesario recordar la protección de los rayos ultravioleta, para esto es importante el uso de gafas de sol. Las únicas gafas que tienen filtros contra estos rayos son las compradas en óptica.
- Cuando lea o estudie, vea la tele o cualquier otro dispositivo electrónico, anímalo a que haga descansos cada 30 minutos en tareas que necesiten la visión de cerca. Una pausa de 5 minutos para dar un paseo o cualquier otra tarea que requiera mirar a lo lejos relajará su visión.
Otras recomendaciones importantes
- Una vez que un/a alumno/a sabe leer, si presenta un bajo rendimiento escolar, es imprescindible atender a posibles síntomas que lo relacionen con un problema visual: dolores de cabeza, frotamiento continuo de ojos, lectura lenta o guiada con el dedo, saltos de palabras o falta de concentración.
- Si un alumno/a en sus primeros años de primaria presenta problemas de hiperactividad, no consigue colorear un dibujo sin salirse o presenta síntomas de déficit de atención, es preciso descartar que no se debe a un problema visual.
- Es necesario enseñar a los/as menores a cuidar de su salud visual y sus equipamientos ópticos –si los llevasen-. Deben aprender a detectar e informar de cambios en su visión, como problemas para leer la pizarra, dolores de cabeza, picor de ojos, etc.
Esperamos que estas recomendaciones y consejos de salud visual infantil sirvan para concienciar a madres y padres sobre la importancia del cuidado de la visión y su influencia en el rendimiento escolar.
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